Acabo de leer el ATL y me entero de que no saldrá más a la luz. La situación económica y el ambiente político-social así lo requieren. Qué malo. Y qué triste.
El periodismo es crítico o es otra cosa. El periodista publica lo que el pueblo ya sabe o intuye, hurga en las tinieblas para sacar a flote la podredumbre de las alcantarillas. Al hacerlo sirve de válvula de escape de la presión en la sociedad y muchas veces sirve de detonante de algún movimiento. No hablo de los periódicos de partidos políticos, hablo de los periódicos de la sociedad, de los medios. Los gobernantes necesitna a ese periodismo: no se dan cuenta de eso y lo persiguen; pero en realidad son necesarios. Deberían ser los primeros en procurar que en la sociedad hubiera más de un medio que les marcara sus fallas y no solo aduladores que les digan que todo está bien.
En México contamos con La Jornada, Proceso, Reporte índigo, entre otros. Son tan libres y críticos como su solvencia económica autónoma se los permite. Algunos han enfrenado el ataque frontal del gobierno (Proceso). En Atoyac no hay: El ATL, que salía cuando había recursos, dejará de salir. Y con ello se confirma que hemos entrado en el tobogán de un período de tinieblas: el PRI está de regreso, el PAN desaprovechó la oportunidad y el PRD es peor que los dos juntos
Triste que un luchador como Desidor Silva renuncie a este partido. El PRD no sabe lo que pierde con la salida de este elemento. Triste que Felipe Fierro tenga que guardar la pluma y dejar de escribir. Atoyac tiene una gran pérdida con él. Humildemente les brindol estas líneas de respeto y valoración. Ora sí que como dice Yuri (al más puro estilo de Chava Ruiz) “siempre habrá tiempos mejores”.
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