Hace un año escuché una historia de Alejandro. Se dice que en una de sus muchas batallas visitó el frente y se enteró de un hecho que le causó mucho coraje: Vió que uno de los combatientes, al momento de inIciarse la refriega se iba haciendo para atrás disimuladamente y de estar en el frente, quedaba en la retaguardia. Así disminuía el riesgo de perder la vida en el combate. Alejandro Magno no le dijo nada pero al siguiente día volvió a visitar el frente y observó al soldado. Sucedió lo mismo.
---¿Cómo se llama ese soldado?, preguntó
---Alejandro, le dijeron.
Alejandro Magno se retorció sobre el caballo y luego lo llamó con un grito seco: ¡ALEJANDRO!
El soldado vino presuroso y se cuadró ante él.
---El nombre hay que llevarlo con gallardía. El nombre llega a ser un distintivo de la persona. O te comportas como un soldado valiente o dejas de llamarte Alejandro.
Esta historia viene a colación porque ¿se acuerdan de la Contadora Patty, aquella que se mencionó hace algunos meses en este blog? Bueno, el tiempo ha seguido su curso y hace unos meses me enteré por la red que la contadora cargaba una panzota y resulta que sí: estaba embarazada.
Mi servidor de correo me avisó en este mes de mayo que había una nueva imagen en el perfil de Paty Méndez: era un bebecito. Rápido me puse en contacto con ella y le pregunté.
Es verdad, ha llegado un nuevo terrícola a este planeta y se llamará ALEJANDRO. Es el de la foto que aparece arriba.
En este Blog amigo de su mamá Patricia Méndez Vázquez, le damos la bienvenida y le auguramos una vida plena de éxito y de grandeza. Le rogamos al Señor Jesucristo que haga de Alejandro una persona de bien, un hombre que honre a sus padres.
¡BIENVENIDO!
1 comentario:
Bienvenido a la pesadilla!
-CR-
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